Lo que estresa a una tanatóloga

Para muchas personas el simple hecho de escuchar la palabra muerte ya les causa estrés. Más de una me ha dicho que cómo puedo ser tan positiva si todo el día escucho historias de dolor. Para el tanatólogo, el dolor tiene un sentido y acompañar a alguien en su tránsito doloroso es un privilegio que puede compararse con muy pocas cosas en la vida. El estrés sin embargo, no es siempre malo como lo pensamos. Cierto estrés es necesario para vivir; entiéndanlo como las cuerdas de un violín. Si están demasiado tensas se revientan pero si están muy flojas de ahí no puedes sacar buena música. Es la tensión perfecta lo que hace que el instrumento y la mente humana, den su mejor función.

Estresarte por algo te relaja de las cosas que habitualmente estás pensando. Se llaman presiones alternas y significa activar otros circuitos de la mente. El carpintero tal vez descansa en casa viendo televisión y el ejecutivo haciendo carpintería en el hogar. Se trata de hacer algo distitno a lo que normalmente haces para no sentirlo como trabajo sino como distracción. Ir a los juegos de la feria, o a remar a unos rápidos puede que no parezca relajación para algunos pero inclusive el gritar y sacar adrenalina, ayuda a que se destensen los músculos del cuerpo.

Quien ya leyó Viajar por la vida, sabe mi historia con la bicicletas. Hoy anduve en ella más de 9 kilómetros. Recorrer las calles de mi ciudad, la misma ruta que normalmente tomo para ir a mi programa de televisión de los jueves pero ahora esperando con ansia un semáaforo en rojo para descansar un poquito, fue realmente divertido. Para algunos de ustedes que aprendieron a montar la  bici desde niños puede que esto no tenga ningún mérito pero creanme que para mí es toda una hazaña. Y pensaba mientras conducía que me quedó cierto trauma  por haber chocado una vez y ahora cada que siento que me rebasan por la derecha me desestabilizo un poco. Así seguramente para quien ha tenido una pérdida emocional , la cercanía de personas extrañas o el estar en un lugar ajeno a casa debe causarles inquietud. 

Yo tengo a mi lado en estos recorridos, a mi marido que me va echando porras, dirigiendo y a mis hijos abriendo camino. Tal vez y sólo tal vez, sea eso lo que intento hacer para mis pacientes. Ayudarlos a seguir viajando por su vida después de  haber recibido un buen raspón.

Ojalá que cada día se sumen más personas al Ciclotón de la Cd. de México, que conquistemos esos espacios normalente destinados a los automóviles y que sintamos que hacemos algo productivo para nuestro cuerpo. Saber que pertenecemos a un grupo de personas que como siempre digo, buscan la paz y el bien.

la-foto

2 pensamientos en “Lo que estresa a una tanatóloga

  1. Yo no se andar en bicicleta lo eh intentado y nunca lo eh logrado, sin duda creo que la vida es un suspiro a pesar de que tengo a penas 30 años, hace un momento escuche un podcast donde hablas del dolor, desde que tengo uso de razón se lo que es tener un duelo muy cercano. Duele bastante pero no te mata, te hace fuerte y es increíble todo lo que viene después, tus éxitos tienen doble merito por grandes o pequeños que sean, si nuestros familiares que se fueron y no pudieron estar presentes físicamente, seguro que donde estén sentirán la misma emoción que nosotros. La vida sigue y tenemos mucho que aprender. Tu trabajo es hermoso pues no cualquiera te acompaña en tus duelos, son palabras perfectas en el momento perfecto. Un fuerte abrazo y espero seguir escuchando todo lo bueno que tienes que decir.

    Saludos»

    Me gusta

Deja un comentario